- Los niños con dificultades del procesamiento sensorial puede que a menudo se sientan ansiosos.
- La ansiedad es más común en los niños que experimentan una sobrecarga sensorial.
- Hay cosas que puede hacer para ayudar a su hijo con su ansiedad y sus temores.
Las luces brillantes, los ruidos, los ambientes y las situaciones desconocidas. Todo eso puede provocar estrés y sobrecarga sensorial en los niños que tienen dificultades del procesamiento sensorial. También pueden causar ansiedad ante futuras situaciones. Esto es particularmente cierto si los niños no están preparados o si les preocupa que ocurran cosas inesperadas.
Conozca más acerca de las dificultades sensoriales y la ansiedad, y cómo puede ayudar a su hijo.
Sobrecarga sensorial y ansiedad
La mayoría de los niños no tienen dificultad para organizar la información que reciben a través de sus sentidos. Pero los niños con dificultades del procesamiento sensorial sí la tienen.
Algunos pueden ser muy sensibles a los sonidos, texturas, sabores, olores, a lo que ven y a otro tipo de información sensorial. Otros pueden tener poca sensibilidad a cosas como la temperatura y el ruido. Algunos chicos son ambos, muy sensibles y poco sensibles.
La ansiedad es más común en niños que son excesivamente sensibles. Puede que experimenten una saturación sensorial y perciban actividades básicas como un ataque contra ellos. Es por ello que puede que sientan temor ante situaciones cotidianas estresantes, como ir a una tienda llena de gente. O puede que les preocupe estar en situaciones que consideran intolerables.
Así es como podría mostrarse la ansiedad en un niño que tiene dificultades del procesamiento sensorial:
- A un niño que no puede tolerar el sonido del “zumbido” de los insectos, puede que le inquiete jugar al aire libre o sentir pánico si un insecto (que produzca un zumbido o no) se le aproxima.
- A un niño de primaria que es muy sensible a los sabores de los alimentos y a las texturas puede preocuparle tener que comer ciertas cosas si va a cenar o pasar la noche en casa de otra persona, puede que se niegue a ir.
- Un adolescente que es muy sensible al tacto puede que no tolere que lo besen o lo abracen. Por lo tanto se aísla en las reuniones familiares ya que le preocupa que su tía más cariñosa lo vea y se le acerque.
Cómo las señales pueden ser confusas
Las dificultades sensoriales a menudo causan ansiedad y miedos. Pero en ocasiones a los padres les preocupa que sus hijos tengan dificultades del procesamiento sensorial cuando en realidad pudieran tener un trastorno de ansiedad (un niño también puede sentirse ansioso por algo que no esté relacionado).
Solo una evaluación llevada a cabo por un profesional puede identificar lo que está ocurriendo. Si no se realiza, puede que sea difícil determinar qué está causando la ansiedad y el comportamiento que esta genera.
Considere esta situación. A un niño no le gusta vestirse por las mañana y por lo general se pone a llorar o empieza a gritar. Podría ser debido a que su sensibilidad extrema sea la causa de que la sensación de la ropa en su piel sea intolerable y le provoque crisis sensoriales.
Pero su comportamiento podría ser debido a otra cosa. Podría estar teniendo rabietas en lugar de crisis sensoriales porque ir a la escuela le causa ansiedad.
Quizás una diferencia del aprendizaje no diagnosticada sea la causa principal. Podría temer que le pregunten en clase por quó no entiende la lección. También podría sentir tanto estrés continuamente que desarrolle un trastorno de ansiedad.
Una pista importante es que las dificultades del procesamiento sensorial afectan varios sentidos en diferentes situaciones. Es inusual que las señales se limiten a una cosa, como tener que vestirse.
Otra pista es el momento. Un niño con dificultades sensoriales podría evitar tener que vestirse todas las mañanas. Pero un niño con ansiedad podría no querer vestirse solamente los días de escuela.
Cómo averiguar la causa del comportamiento
Los terapeutas ocupacionales (OT, por sus siglas en inglés) pueden evaluar si los niños tienen dificultades sensoriales y luego ayudarlos con esos problemas. El médico de su hijo o la escuela podrían recomendarle uno.
Un psicólogo infantil puede evaluar si su hijo tiene un trastorno de ansiedad y tratarlo sin importar cuál sea la causa.
El psicólogo también puede determinar si hay otras condiciones presentes. Los niños con TDAH, a menudo tienen dificultades sensoriales. También suelen tener problemas de ansiedad. Lo mismo es cierto para los niños con el trastorno del espectro autista.
Cómo puede ayudar
Entender las dificultades del procesamiento sensorial de su hijo (y lo que causa su ansiedad) es la clave para ayudarlo. Estas son algunas cosas que puede hacer.
Conozca cuáles son los desencadenantes comunes y dígale que lo sabe. Por ejemplo, si su hijo detesta las multitudes y el ruido, hagan un plan para ir a la juguetería cuando no haya mucha gente. O que a usted no le importa irse del parque de diversiones temprano si se vuelve demasiado intolerable para él.
Dedique tiempo para prepararlo. Comente lo que podría pasar antes de estar en una situación que pueda ser abrumadora. Reserve tiempo para hacer rápidamente saltos de tijera o tocarse los dedos de los pies para ayudarlo a regular su sistema sensorial. En la noche seleccionen ropa cómoda para que su hijo no se preocupe por la ropa que “tiene” que ponerse al día siguiente.
Proponga estrategias y anímelo a que abogue por sí solo. Encuentre un momento tranquilo cuando su hijo esté de buen humor para hablar acerca de situaciones que le preocupan. Discutan cosas que pudiera hacer para sentir menos estrés. Por ejemplo, ¿le gustaría pedirle a la abuela que la salude dándole la mano en lugar de un abrazo? ¿O explicarle juntos que hay ciertos alimentos que él no puede comer?
Existen otras maneras en las que usted puede ayudar a su hijo a manejar sus dificultades sensoriales y la ansiedad. Descubra estrategias que puede intentar en casa para las dificultades del procesamiento sensorial. Conozca cómo es un día típico en la vida de un niño con dificultades sensoriales. Y conozca las señales de la ansiedad a diferentes edades. Si hay algo que le preocupa, no deje de discutirlo con el médico de su hijo.
Puntos clave
- Los niños con dificultades sensoriales a menudo experimentan ansiedad porque la vida diaria puede incomodarlos mucho.
- En ocasiones el trastorno de ansiedad puede confundirse con las dificultades sensoriales y viceversa.
- Si observa señales de ansiedad en su hijo es importante comunicárselo al médico.
Fuente: Peg Rosen